Si eres cuidador informal y trabajas: qué esperar de tu empleador

En Puerto Rico, se estima que más de 440,000 personas son cuidadores informales, y más de la mitad, además, trabajan en un empleo fuera del hogar. Nos referimos al que no recibe remuneración económica por el cuido de otra persona. En Puerto Rico el 52.2% de estos cuidadores posee un empleo fuera del hogar, y el 31.8% está empleado en la empresa privada. Ser cuidador es un acto de amor, pero también es un gran reto y sacrificio. A continuación, te explicamos qué debes esperar de tu empleador:

Entender que no eres el único

Muchos empleadores ya saben que sus empleados también cuidan de sus padres, abuelos o familiares mayores. Según una investigación reciente, el 77% de las empresas en Puerto Rico han recibido peticiones de arreglos laborales flexibles por parte de cuidadores. Esto quiere decir que no es raro pedir ayuda o ajustes.

Puedes hablar con tu jefe

Es importante que tengas una conversación honesta con tu supervisor o con un miembro del Departamento de Recursos Humanos de la empresa en donde trabajas. Explícales tu situación y cómo afecta tu tiempo o energía. Muchas veces, los supervisores no saben que estás pasando por esto, y una buena conversación puede abrir puertas a cambios positivos.

Flexibilidad: un derecho que puedes pedir

Una de las formas en que más te puede ayudar tu empleador es permitiéndote trabajar de manera flexible. Esto puede incluir:

• Cambio en los horarios actuales
• Evaluar la posibilidad de trabajar de forma remota
• Ajustar tus tareas

Esto no significa que trabajes menos, sino que puedes trabajar de forma distinta, para poder cumplir con tu rol de cuidador y también se eficiente en tu empleo.

Días libres para emergencias

Algunas compañías ofrecen días específicos para ausencias por cuidado familiar. Infórmate con el departamento de Recursos Humanos que opciones tienes. En otros casos, algunos empleados donan horas acumuladas para compañeros que las necesiten por emergencias. Infórmate si existe esta opción en tu empresa.

Recursos y apoyo

Existen otras formas de apoyo como, por ejemplo:

Contigo Cuidador de Triple-S Advantage: Únete al programa Contigo Cuidador para que te orientes sobre cómo manejar los procesos y retos que enfrentas a diario. Compartimos algunas de las ventajas de pertenecer al programa:

• Talleres Contigo Cuidador – es una serie de talleres con herramientas útiles para ampliar tus conocimientos enfocados en el cuidado del paciente, uso de la tecnología, asuntos legales y de finanzas, manejo de ansiedad y manejo del duelo, autocuidado, movilidad física, entre otros. Busca el calendario en cuidadores.sssadvantage.com
• Guía del Cuidador – es una guía escrita que te enseña a hacer un plan de acción para organizar tu vida y la del paciente; te explica cuáles son los documentos necesarios para cuidar a esa persona y manejar sus asuntos; te adiestra para trabajar con tus finanzas y te habla sobre algunas condiciones crónicas, sus síntomas y cómo tratar a un paciente que las padezca. Conoce la guía y descárgala a través de nuestro portal cuidadores.sssadvantage.com
• Actividades – durante el año se planifican eventos especiales dedicados a cuidadores y sus seres queridos para compartir y expandir esta red de apoyo tan importante en este proceso. Entra a la página de Facebook Triple-S Advantage, dale “like” y pendiente a nuestros anuncios de las próximas actividades.

Estos recursos pueden hacerte la vida mucho más llevadera.

Espera sensibilidad, no pena

Tienes derecho a un ambiente de trabajo donde se te entienda y apoye. Por eso es importante que los líderes y supervisores estén entrenados para manejar este tipo de situaciones con respeto y empatía.

Si eres adulto mayor y aún trabajas

Si además de cuidar, tú también eres mayor de 60 años, que sepas que aún tienes mucho que aportar. Muchas empresas están reconociendo el valor de las personas mayores en el trabajo.

Trabajar y ser cuidador no es fácil, pero puedes buscar apoyo para hacerlo. Las empresas en Puerto Rico están empezando a reconocer esta realidad. Habla, pregunta e infórmate. Tú mereces un lugar de trabajo donde se valore tu esfuerzo como empleado y como cuidador.